Sembrar zapallos es algo muy sencillo, no es necesario comprar semillas en un vivero para eso: con adquirir un zapallo cualquiera en una verdulería, extraer sus semillas y sembrarlas, ya tendremos zapallos para tirar para arriba (si es que lo hacemos en la época adecuada, llámese, primavera y verano, evitando las heladas invernales).
Pero hoy en el vivero ví este sobre y, como rezaba “mejorado”, me picó el bichito de la curiosidad y pretendí darle una oportunidad en la huerta. ¿En qué consistirá lo de “mejorado”?
En cuanto al nombre científico (cucurbita maxima duch), se refiere a lo que en Argentina , Chile, Ecuador y Perú llamamos simplemente “zapallo”.
Hay datos sobre este zapallo que me interesan bastante: como muchas otras especies similares, sus tallos son trepadores, por lo cual podré utilizar espacio vertical en mi jardín. Atención con esto: “El fruto es un tipo de baya llamada pepónide; presenta gran variación (polimorfismo); puede ser elongado o esférico, de color verde opalescente a naranja intenso, pasando por un crisol del ámbito de los colores amarillentos.” (wikipedia)
A tener en cuenta: se cosecha alrededor de 6 meses luego de la plantación, con lo cual no es mala idea ir sembrándolo ahora en invernadero pretendiendo cosecharlo en enero de 2013… otro detalle importante es que el fruto se puede conservar hasta 6 meses en buenas condiciones.
“Conservación postcosecha:
Los frutos enteros se conservan de 15 a 30 días o más en lugares fresco – ventilados; se conservan 6 meses o más a 10°C y 50 a 70% de humedad relativa. Una vez partido, el zapallo debe refrigerarse.”
Haré lo siguiente: transplataré a macetas algunos zapallos que crecieron en el jardín durante el otoño, con el fin de salvarlos de las heladas invernales, y además sembraré esta variedad de zapallo criollo para ver qué tal va.