Anoto esto sobre todo para no olvidar la variedad de peral que obtuvimos en un vivero aquí en Junín, se trata de la variedad Williams, de carne jugosa, más blanda que la “pera asiática”, produce flores de color blanco y da frutos en marzo, aparentemente.
Resulta útil realmente tener frutales que den fruta cuando se termina el verano, dado que ya hay muchos que producen la fruta durante la primavera/verano (caso de la Pitanga), o durante el verano (ciruelo, damasco, durazno, naranja, limón, mandarina). El otro frutal del que podremos recojer frutas en otoño es la feijoa sellowiana o falso guayabo.
No sé si podar una de las dos ramas centralas que se entrecruzan, dado que han podado la rama centran el algún momento. La idea es lograr la forma natural de un peral.